Las dietas orgánicas se han vuelto muy populares gracias a los beneficios naturales que aportan al cuerpo. Una fruta orgánica que ha captado nuestra atención es el […]
Las dietas orgánicas se han vuelto muy populares gracias a los beneficios naturales que aportan al cuerpo. Una fruta orgánica que ha captado nuestra atención es el açai, pronunciado «asai», por ser un excelente complemento en nuestra dieta. ¿Te animas a probarla?
El açai proviene de la selva lluviosa del Amazonas, al norte de Brasil y en los últimos meses se ha vuelto bastante popular en México, sobre todo en las tiendas orgánicas, prometiendo a los consumidores grandes aportaciones nutricionales.
Esta fruta contiene: Omega 3, 6 y 9, grasas esenciales involucradas en funciones vitales para nuestro cuerpo. El omega 3 ayuda a mantener bajos los niveles de colesterol y triglicéridos, estabiliza el ritmo cardiaco, mantiene limpias las arterias y nivela la presión arterial.
También, el açai es una excelente fuente de antioxidantes, sustancias necesarias para proteger a las células contra el daño oxidativo causado por los radicales libres (pérdida de memoria, pérdida de capacidad mental, enfermedades degenerativas y envejecimiento prematuro).
De acuerdo a estudios realizados en Estados Unidos, el ser humano debe de ingerir al menos 3500 unidades ORAC diarias (Capacidad de Absorción de Radicales libres de Oxígeno) y el açai aporta el menos 3800 unidades ORAC.
Puedes comer açai en el desayuno y tendrás un día lleno de energía. Aquí te dejo una receta:
Tiempo de preparación: 8 minutos
Ingredientes:
- 1/2 taza de fresas congeladas
- 1 plátano
- 4 cucharadas de açai en polvo
- 1 taza de leche de almendras
- 1/2 cucharada de miel
- 1 cucharada de semillas de chia
Licúa el açai con la leche de almendras y las fresas hasta lograr la consistencia deseada, sirve en un plato hondo y agrega la fruta y las semillas de chía como toppings.
¡Disfruta!
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